#NoMoreMatildas, la campaña que visibiliza a las científicas, llega a Europa
Si Einstein hubiese nacido mujer, es probable que su apellido apenas nos sonara hoy y, seguramente, los méritos de sus descubrimientos se los hubiera llevado algún compañero de investigación o incluso su marido. Se trata del ‘efecto Matilda’, la injusticia sistemática contra las científicas que durante décadas han visto invisibilizado su trabajo solo por ser mujeres.
Para acabar con esta problemática, la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT) ha desarrollado la campaña #NoMoreMatildas (No más Matildas). Así, se pretende recuperar las referencias al trabajo de las científicas en los libros de texto escolares para despertar la vocación científica en las niñas.
“Referentes ausentes en los libros de texto”
La campaña se ha presentado en la oficina del Parlamento Europeo de Madrid. Al un acto ha asistido la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, los ministros de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, y de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, varias eurodiputadas y los creadores de la campaña, desarrollada de manera altruista.
“Son miles de referentes que se les han hurtado a las niñas y que han estado ausentes de los libros de texto“, dice la ministra Celaá.
“Las mujeres hemos sido pioneras en muchas cosas pero siempre se nos ha vetado porque la historia la han escrito los hombres“, una injusticia a la que hay que poner fin “democrática y progresivamente” a través de la educación, que es la herramienta más poderosa para cambiar la sociedad, acabar con la brecha de género y aprovechar el talento, subraya.
A lo largo de la historia, han sido muchas las investigadoras que han visto cómo sus descubrimientos eran merecedores de un Premio Nobel que se otorgaba a un hombre. Como Nettie Stevens, descubridora de los cromosomas sexuales; Rosalind Frankin, descubridora de la estructura de doble hélice del ADN, o Lise Meitner, experta en radiactividad y física nuclear, entre otras.
Infrarrepresentación y techos de cristal
Celaá recuerda que el porcentaje de mujeres en carreras científicas se reduce al 28,5%, cifra que baja al 12% en grados como informática. Mientras, en la Formación Profesional, la presencia de mujeres en áreas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) es aún más grave, con solo un 9% de mujeres en la especialidad de mecánica y el 4% en electrónica.
Pero lo más grave de esta situación -advierte la ministra- no es solo la evidente pérdida de talento humano, sino que en el futuro los empleos de las áreas STEM serán los mejor remunerados y si no cambian las cosas, las mujeres serán las más perjudicadas por la exclusión.
El ministro Pedro Duque valora la importancia de esta iniciativa porque, aunque en los últimos años ha habido avances en igualdad, “queda mucho por hacer”. Por su parte, Carmen Calvo destaca que la campaña servirá para que “todas las Matildas sean visibles y animen a las más pequeñas de la sociedad a ser lo que quieran, y a contribuir a que la sociedad deje de crear estereotipos en dirección contraria”.
Cuentos que denuncian la injusticia sistemática
Desde AMIT, la catedrática Carmen Fenoll subraya que ya no hacen falta más datos para saber que las mujeres están infrarrepresentadas en los ámbitos STEM, sino acciones que mejoren la vida de las niñas que quieran dedicarse a la ciencia y la tecnología porque “no podemos alimentar estas vocaciones para después abandonarlas en callejones sin salida“.
“Es hora de pasar a la acción” y de que los gobiernos comprometan fondos para combatir los estereotipos, reclama.
Así, en España y con el respaldo de escritoras, científicas, instituciones y medios de comunicación, la iniciativa ha arrancado con la publicación de tres biografías imaginarias de Einstein, Alexander Fleming y Schrödinger que pueden descargarse gratuitamente.