Paul B. Preciado

El filósofo trans español especialista en teoría "queer", Paul B Preciado, junto a la portada de su nuevo libro "Dysphoria mundi". Foto: Smith

Paul B. Preciado: “En 100 años no se inscribirá si has nacido niño o niña”

EFE | Barcelona - 5 diciembre, 2022

El filósofo español Paul B. Preciado, escritor, crítico de arte y una las figuras contemporáneas más influyentes por su trabajo sobre las políticas del cuerpo, el género y la sexualidad, especialista en teoría “queer”, pronostica que, a más tardar “en 100 años, no habrá inscripción de diferencia sexual en los papeles de la administración en el nacimiento porque se considerará discriminatorio”.

Preciado ha hecho estas declaraciones durante la presentación de su nuevo libro “Dysphoria mundi” (Anagrama), en el que plantea las “mutaciones” que vive el planeta y que ofrecen una oportunidad de cambio de paradigma menos “opresor”.

Y entre los cambios y mutaciones que vivimos, ha apuntado su convencimiento de que todas las personas son ya “no binarias”, pues “no existe lo femenino o lo masculino”.

“Esa inscripción es discriminatoria, tanto como sería hoy diferenciar por raza o religión, como cuando en la Inquisición se hablaba de pureza de sangre. La pureza de sangre no existe, como tampoco existe la masculinidad o la feminidad”, ha añadido.

Nuevas realidades

Para el filósofo trans, discípulo intelectual de Judith Butler y la teoría “queer”, lo femenino y lo masculino son “nociones políticas”.

“Ese me parece que debería ser el debate central del feminismo, y no si se le brindan los mínimos derechos a las personas trans”, ha apuntado.

Y es que Paul B. Preciado considera que ya se ha “malgastado demasiado tiempo en debates estériles como las “identidades” o “los nacionalismos”en lugar de hacer la revolución contra la norma y las “tecnologías de la muerte y la violencia“.

En “Dysphoria mundi”, una obra en la que escribe un diario de los últimos años, con la pandemia de la Covid-19 ocupando un lugar predominante, el filósofo muestra un mundo “que no sabemos dónde va”, si bien elige “tener esperanza en el futuro” por la “naturalidad” con la que las nuevas generaciones sí quieren enfrentarse a las nuevas realidades.

La disforia como condición planetaria

Para gestionar ese nuevo mundo, ese nuevo paradigma, anima a colectivizarse a aquellas personas que sientan “malestar” en un mundo que les considera “disfóricos” .

“Ninguno estamos bien. Si alguien lo está, que lo diga. Vamos a dejar de luchar individualmente por encajar y a unirnos”, ha apuntado Preciado, que cree que la diferencia entre su “disforia” y la del resto de personas radica en que él tiene conciencia de ella y los demás no.

El filosofo apunta que, como persona trans, la administración le ha tildado de “enfermo” con “disforia de género”.

“No veo la disforia como una enfermedad mental, sino como una condición planetaria: todo cuerpo vivo que se intenta resistir a las tecnologías de la violencia que le son impuestas es disfórico”, señala Paul B. Preciado a propósito de “tecnologías capitalistas, nacionalistas, racistas o de vigilancia”.

Entre otras “estrategias de resistencia” a esas violencias, Preciado ha señalado “pequeños gestos” como dejar las redes sociales, “una tecnología de gobierno que nos inflige disciplina y nos crea adicción”.

El filósofo y comisario de arte, que publicó anteriormente obras sobre filosofía de género y cambios sociales como “Manifiesto contrasexual” o “Yo soy el monstruo que os habla”, en el que denunciaba las teorías del psicoanálisis sobre lo trans, se encuentra en pleno proceso de adaptación cinematográfica de “Orlando” de Virginia Woolf.