
La directora de la Oficina del Parlamento Europeo (PE) en España, María Andrés, durante la entrevista con Efe. EFE
¿Por qué se tienen que fijar en si llevo tacones?
Las mujeres europeas todavía deben vencer muchas barreras para alcanzar los cargos más altos en instituciones y empresas y, una vez allí, siguen lidiando con dificultades para conciliar, con la discriminación sexual y “la tiranía estética”, explica a Efe la directora de la Oficina del Parlamento Europeo (PE) en España, María Andrés.
“Que se fijen más en las piernas que en quien habla. Que te traten de manera diferente cuando estás en una reunión a pesar de tener el mismo cargo que tu compañero. Todas hemos sufrido esto en algún momento de nuestra carrera”, asegura en una entrevista.
También ella, que lleva 15 años ocupando puestos de responsabilidad en instituciones europeas y acaba de recibir el premio Simone Veil a la Igualdad y la Diversidad 2019 por la iniciativa “#DóndeEstánEllas“, dirigida a impulsar la visibilidad de las mujeres en los debates, conferencias y seminarios en los que se abordan temas europeos.
Voces femeninas
El pasado 8 de marzo, coincidiendo con la explosión del movimiento mundial “#MeToo” en contra del acoso a las mujeres, la representación de la Eurocámara en España tomó la decisión de incluir voces femeninas en todas sus conferencias, seminarios o debates, compromiso en el que ha logrado involucrar a instituciones, observatorios y universidades españolas.
En la actualidad, ya son 27 las entidades que forman parte de esta iniciativa pionera a nivel europeo, y en la que participan organizaciones como ONCE, Cermi o las universidades Complutense y Rey Juan Carlos.
“En la sociedad española, en este cuarto de hora de la Historia, estamos todos intentando dar ese paso más, y el PE es un buen paraguas para englobarlos bajo un mismo compromiso”, destaca.
El objetivo no es solo contribuir a reducir la brecha salarial, que lleva a las mujeres cobrar un 16 % menos de media a nivel europeo, sino aportar “referentes” a las jóvenes que se incorporan al mercado laboral.
“Está muy demostrado científicamente que la falta de referentes femeninos hace que las mujeres no opten por luchar por ese tipo de puestos”, subraya.
Las aventuras de una alta funcionaria europea
Con “#DóndeEstánEllas”, el PE en España ha abierto la posibilidad de “promover la visibilidad de mujeres inspiradoras y ese talento”, un espejo en el que también se miran los seguidores de la cuenta personal de Andrés en Instagram, “Conciliacomopuedas”, que ilustra las aventuras de una alta funcionaria europea que intenta compaginar su intensa agenda laboral con la crianza de sus tres hijas.
La titular de la Oficina del PE en España admite que todavía no ha encontrado una “fórmula mágica” para conciliar, un arte que define como el de “intentar llegar a todo y nunca llegar a nada”.
Es algo que, según dice, “hay que cambiar”, sobre todo en España, donde “la corresponsabilidad con los maridos, con las personas que pueden hacerse cargo de las tareas de la casa, todavía no es una realidad generalizada”.
“Todavía no se ha asumido -la maternidad- como una cuestión de Estado y el cambio de óptica que necesitamos en Europa es que la maternidad no es cosa de mujeres, el tener hijos es una cosa de pareja”, remarca.
La tiranía estética a la que se somete a las mujeres
Finalmente, alude a la “tiranía estética” a la que la sociedad somete a las mujeres, juzgándolas por su apariencia y por su edad, como otro de los obstáculos que les impide progresar a nivel laboral.
Con todo, Andrés sostiene que Europa es la que más camino ha recorrido hacia la igualdad y está en condiciones de “abanderar” esta causa en el entorno laboral, “para no seguir tolerando que me hablen de forma diferente por ser mujer ni que piensen que si llevo tacones en una reunión es por falta de confianza, y no porque simplemente es un código estético”