
La poeta y escritora Leire Bilbao (i), en una fotografía de Txelu Angoitia y la portada del poemario "Aguas Madres" (d) editado en castellano por La Bella Varsovia
Leire Bilbao: “Cuando nace un hijo, nace también una madre”
“Aguas madres” es la traducción al castellano de “Etxeko Urak”, publicado por Susa en 2020, un poemario en el que la escritora vasca Leire Bilbao se sumerge, con un lenguaje sencillo y con olor a mar y salitre, en la maternidad y los cambios corporales y vitales que acarrea, y en el que también “levanta la vista” y reflexiona sobre el ejercicio de la escritura cuando una tiene niños a su cuidado.
“Me gusta decir que no es un libro sobre la maternidad, sino que es un libro escrito desde la perspectiva de la maternidad. Entiendo que la poesía es eso, un punto de vista, una perspectiva, un sitio desde donde mirar. Y la maternidad me dio esa nueva mirada, incluso un nuevo idioma debajo de la piel, debajo del vientre. Un idioma más físico”, explica la autora en una entrevista con Efeminista.
“Cuando nace un hijo, también nace una madre”, asevera Leire Bilbao (Ondárroa, Vizcaya, 1978), Premio Euskadi de Literatura Infantil en dos ocasiones, a propósito de “Aguas madres”, el poemario que en 2021 le valió el Premio Lauaxeta y que ahora ha publicado el sello de La Bella Varsovia con traducción de Ángel Erro.
“Sentí la sensación de que junto a mi hijo nacieron un montón de preguntas y me di cuenta de que muchas madres también sentimos que nos estamos construyendo, que adoptamos una nueva identidad, un nuevo sentir […] No es inesperado, pero es inexplicable. Hay un poema que dice que para nacer hay que romper todo un mundo. Y es un poco esa sensación”.
Mundos imaginados
La simbología del agua recorre todo el poemario y Bilbao recuerda que en la mayoría de los mitos de la creación “el agua siempre ha representado la fuente de la vida, la energía divina o la fecundidad de la vida y de los seres vivos”.
Nacida en el costero pueblo vizcaíno de Ondárroa, hija, nieta y sobrina de marineros y pescadores, Leire Bilbao reconoce que el entorno en el que ha crecido ha influido en los mundos imaginados que construye. Toda su obra tiene “bastante relación con el mar y las aguas”.
Pero en este caso, la traducción del título pierde el matiz del original en euskera. Como explica la poeta, “‘etxeko urak’ es una expresión de mi pueblo que decimos cuando una persona viene de una casa, de una familia y ha bebido de sus modales y tradiciones”. Y, sin embargo, se beba de donde se beba, Bilbao ahonda también en la imposibilidad de conocer a una madre en su totalidad.
“También yo soy tan madre pez como madre árbol como madre pájaro […] Todos nacemos de una madre que no llegaremos a conocer del todo”, escribe Bilbao en la primera página que abre el poemario.
Escribir y maternar
En la tercera parte del libro, la autora se enfrenta al binomio escribir y maternar, y reflexiona sobre la dificultad de encontrar el tiempo y el espacio para el ejercicio de la escritura inspirada por obras de Jane Lazarre, Anne Sexton, Tillie Olsen, Simone de Beauvoir, Adrienne Rich, Helene Deutsch o Doris Lessing.
“Cuando estamos embarazadas, hay mucha gente que te da consejos y te regala libros sobre maternidad. Yo sentía que eso no me valía para las preguntas y sensaciones que tenía. Encontré aliento y respuestas en la ficción, por raro que parezca”, explica Bilbao aludiendo a estas escritoras, y denuncia que a pesar de que hayan pasado “cuarenta o cincuenta años sigamos con las mismas interrogantes”.
La poeta y escritora confiesa que este poemario “tenía que haber llegado mucho antes”. Durante el embarazo y los primeros años de maternidad se dedicó a la poesía y literatura infantil, “sentía la necesidad de hacerlo”.
Pero Leire Bilbao reconoce que la poesía para adultos “necesita de otro aliento” y fue durante los meses de encierro en la pandemia cuando encontró el tiempo para dedicarse a la creación de “Aguas madres”.
Como declara Bilbao y se deja ver en varios poemas, hay una aceptación de la renuncia en la que la voz poética “encuentra paz” pero también “empoderamiento”, ya que renace “como el ave Fenix”.
Próximos encuentros
Preguntada por la poesía en el panorama cultural vasco, Bilbao subraya que “mientras que la poesía y la improvisación oral (el bertsolarismo) está muy viva y llena plazas, la escrita queda más relegada”.
Sin embargo, celebra que sea un género que “goza de buena salud” y que es “universal y no caduca”, porque “aunque se traduzca a cualquier otro idioma, lo puedes palpar y disfrutar”. De hecho, antes de que “Aguas madres” se tradujera al castellano, se publicó en griego y en catalán.
Bilbao aboga por “la pluralidad de tipos de madres y la pluralidad en la poesía”, y reivindica que este género penetre en las aulas desde una edad muy temprana, pues “el primer contacto que tienen los niños con la literatura es a través de la poesía”.
El sábado 22 de abril la autora presentará el poemario en la madrileña librería La fabulosa a las 12.30h, junto con el traductor Ángel Erro y la periodista y directora de “Mamagazine” Victoria Gabaldón. Asimismo, por la tarde estará en el festival “De poesía por Getafe”, en una lectura colectiva.