Rosalía, el icono feminista que surgió de la música
Rosalía tiene 25 años, una garganta flamenca que es un prodigio y una creatividad, intuición y arranque que con solo dos discos en el mercado, “lo ha petado” entre los modernos y en la industria.
Pero Rosalía se ha convertido en mucho más: un icono feminista para millones de niñas, adolescentes y mujeres. Y niños, adolescentes y hombres…
Una mujer con poder y con fuerza
“La forma en la que hago música y la forma en la que me presento como mujer dentro de esta industria creo que se compromete con la imagen de una mujer con poder y con fuerza. Siempre”, aseguró la cantante a Efe a su llegada a Las Vegas, hasta donde viajó en noviembre para participar en la gala de los Latin Grammy. Y agregó: “Así es como me siento cómoda y creo que las mujeres que me inspiran son así”.
Si “Malamente” confirmó que Rosalía es la cantante del momento, “Pienso en tu mirá” la elevó al estatus de revelación feminista al considerarse un alegato contra la violencia machista.
Y “A ningún hombre”, el tema que cierra su segundo disco, “El mal querer”, es toda una declaración de principios:
“A ningún hombre consiento
que dicte mi sentencia.
Solo Dios puede juzgarme.
Solo a él debo obediencia.
Hasta que fuiste carcelero
yo era tuya, compañero
hasta que fuiste carcelero…
Rosalía ha contribuido en varias de las letras de su segundo trabajo pero la de “A ningún hombre” es totalmente suya.

La cantante Rosalía en una entrevista con la Agencia Efe. EFE
Inspiración de la novela “Flamenca” del siglo XIII
De “El mal querer”, que tenía terminado ocho meses antes de presentarlo, lo primero que tuvo fue el título, que le inspiró una novela, “Flamenca”, del siglo XIII.
Su protagonista es un personaje “con fuerza y poderoso” y “la guía” de los “capítulos” de su disco: “Malamente” es augurio; “Que no salga la luna”, la boda; “Pienso en tu mirá”, los celos; “De aquí no sales”, la disputa; “Reniego”, el lamento; “Preso” -un tema en el que pone la voz Rossy de Palma-, la clausura; “Bagdad”, la liturgia; “Di mi nombre”, el éxtasis; “Nana”, la concepción; “Maldición”, la cordura, y el citado “A ningún hombre”, el poder.
“No quería una colección de canciones. Busqué un tema central que las conectara y ese tema es el amor oscuro, esa historia como de tragedia griega que se sabe lo que va a pasar. A partir de las letras se sugiere todo el arco narrativo de ese amor”, detalló Rosalía en una entrevista con Efe en Madrid, con motivo de la presentación de su segundo disco.
Melena de cantaora antigua, chandal del “muy moderno” Palomo Spain y unas uñas que son pura orfebrería, la barcelonesa Rosalía Villa (San Esteban de Sasroviras) es el punto loco en un arte tan codificado como el del jondo, un reino que no en vano se llama el de “los cabales”.
Un proyecto “capitaneado” por una mujer
Rosalía reivindica a las mujeres “con poderío” y reclama que se de crédito a las que están en la industria de la música.
“Muchas veces esta industria tiene una tradición masculina, y muchas veces hay muchas mujeres que están detrás de las grandes canciones de pop que están sonando hoy en día y no se sabe que esas mujeres están detrás, pero en cambio los hombres (…) tienen crédito y mucha gente conoce a los grandes productores”, remarcó la cantante.
“¿Dónde se habla de las mujeres que estamos produciendo también o que componemos, liderando nuestros proyectos y tomando decisiones en todo momento?”, se preguntó.
La catalana celebró haber estado rodeada “de un equipo fantástico para poder tirar adelante” ‘El mal querer’. Pero ante todo -apuntó- “liderándolo y cuidando cada detalle”.
¿Un equipo de hombres y mujeres? “De hombres y mujeres, claro que si. Pero que lo capitanea una mujer”, zanjó.

“La música es un oficio como cualquier otro. Quiero dedicar mi vida a esto.” asegura Rosalía.
La satisfacción de hacer música
No se deja impresionar por sus candidaturas a los Grammy latinos o los millones de escuchas en Spotify, porque, argumentó, ella hace música “por necesidad” aunque sí es verdad, dijo, que está “muy agradecida” por el reconocimiento.
“La música es un oficio como cualquier otro. Quiero dedicar mi vida a esto. Durante diez años es lo que he hecho y es lo que quiero hacer. A veces acertaré y otras acertaré menos. Solo con poder hacer música me siento satisfecha”, aseguró a la vez que guiñó un ojo y reveló que confía mucho en su intuición.
En ese camino uno de sus propósitos fundamentales es que la estructura de producción que ella está creando “sirva para las generaciones venideras” en España, “donde todavía hay mucho por hacer” para “normalizar” el acceso de la mujer a carreras como la suya.