
Crearán un banco de tejido placentario de mujeres que han superado COVID-19
Investigadores de Málaga han puesto en marcha un proyecto pionero en el que analizarán los riesgos de la COVID-19 sobre la placenta y el feto en mujeres que han dado positivo durante el embarazo. Este estudio se realizará en mujeres que den a luz en Andalucía.
El objetivo es crear un banco de tejido de aquellas mujeres que han superado el coronavirus. El estudio liderado por el grupo de I+D+i del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga (IBIMA), en el que participan también investigadores de la Universidad malagueña (UMA), ha recibido 10.000 euros de financiación de la farmacéutica americana Ferring.
Según ha informado la Universidad, se investigarán las consecuencias de la reacción inflamatoria materna producida tras la infección por SARS-Cov2 a nivel placentario.
Impacto de la COVID-19
El profesor de Ginecología de la UMA Ernesto González Mesa ha explicado que la placenta es la estructura que mantiene la conexión entre el compartimento materno y el fetal y “cualquier modificación estructural puede tener un impacto negativo tanto para el curso del embarazo como para el desarrollo fetal”.
“Ya sabemos que las modificaciones en la microcirculación placentaria pueden ser responsables de aborto, restricción del crecimiento fetal, preeclampsia y parto pretérmino, o lesiones hipóxicas-isquémicas neonatales”, y con este nuevo estudio se pretende indagar sobre cómo la infección por COVID-19 induce estas modificaciones.
Para su desarrollo se analizarán las placentas de las mujeres que son positivas o lo han sido durante el embarazo y den a luz en cualquier punto de Andalucía.
El banco con mayor número de placentas del mundo
Además de estudiar la reacción inflamatoria placentaria, este trabajo permitirá crear un banco de tejido placentario procedente de las mujeres que han superado el coronavirus, que se convertirá en la primera colección de tejido placentario y sangre fetal de casos de COVID-19 y gestación en un biobanco de gestión pública.
“Esta colección servirá para analizar el mayor número de placentas y muestras de sangre de cordón recogido hasta el momento a nivel mundial”, ha indicado.
Al ser casos incluidos en el registro español, serán accesibles todos los datos clínicos y epidemiológicos relacionados, siendo posible correlacionar los resultados de los análisis que se efectúen con las variables médicas, obstétricas y neonatológicas recogidas.
En busca de un protocolo
En función de los hallazgos a nivel placentario, se podrá establecer el protocolo de actuación diagnóstica en gestantes con infección por SARS-Cov-2 “con objeto de terminar situaciones de alto riesgo o compromiso fetal que hicieran necesario un tratamiento específico o la extracción fetal”, ha destacado.
El estudio, que tendrá una duración de tres años -los primeros resultados se obtendrán en el segundo trimestre de 2021- tiene el aval de la Sociedad Andaluza de Ginecología y Obstetricia y cuenta con colaboradores de más de 24 hospitales andaluces.